Os presentamos al banco “de aldea”; los que tienen una (“aldea”) nos entenderán. Este banco rústico no tiene más pretensión que la de proceder de una casa en el campo, estar hecho de manera artesanal, y ser testigo del paso del tiempo (mucho tiempo), con sus imperfecciones y marcas. Lo único que hemos hecho es limpiarlo con paciencia y cariño, tratarlo y darle un barniz. Nos atreveríamos a decir que no existe otro igual.
Medidas: largo 205cm, fondo 30cm y altura 48cm.
Antes 550€