Sillas diseñadas en los años 50 por el holandés Rudolf Wolf para el fabricante Elsrijk. Un icono del diseño industrial holandés de la segunda mitad del SXX. La estructura es de hierro y los apoyabrazos de bakelita. Rudolf Wolf proponía en sus creaciones un estilo de vida moderno y “en movimiento”. Su trabajo como diseñador de muebles fue relativamente corto; a partir de los años 70 lo “abandonó” para dedicarse a la pintura y sobre todo escultura, en ocasiones utilizando el mismo material con el que se fabricaron sus muebles. Viendo el diseño único de este conjunto, nos lo creemos.
La altura de las sillas es de 81cm y la altura del asiento de 47cm. El modelo con brazos tiene un ancho 57,5 cm y un fondo de 58cm. El modelo sin brazos tiene un ancho de 41cm y un fondo de 50cm. "